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10 de noviembre de 2017 publicado en

Lámparas de pie, la iluminación desconocida

Lámparas de pie, la iluminación desconocida

Cuando trabajas con la iluminación, uno de los puntos claves que aprendes antes de nada es a ver cómo, usando un tipo de luz u otra, puedes hacer que una habitación se vea más grande o más pequeña.

No es solo el hecho de que la iluminación influye, también lo hacen el color de las paredes y el techo, los suelos, los muebles que haya, etc.

La iluminación mediante lámparas de pie

Una lámpara de pie está hecha con un brazo que puede ser dirigible y regulable capaz de oriental el haz de luz. Se trata de una lámpara que puede quedar muy bien en cualquier estancia pero, principalmente, en el salón, dormitorio, despacho o sala de lectura son los lugares mejor pensados para ella.

Cuando están encendidas, estas lámparas consiguen centrar la atención en la zona que iluminan, dotándolo de un aura extraña. Cuando están apagadas, aunque no se notan tanto, según el diseño que se haya escogido pueden llamar más o menos la atención.

Eso sí, conviene que, a la hora de elegir lámparas de pie, sea combinadas con las lámparas de techo y de sobremesa que haya en la estancia ya que, de lo contrario, el efecto no va a quedar bien.

Has de tener en cuenta varios aspectos de las lámparas de pie. Estos son:

Tonos de luz

Las lámparas de pie suelen incorporar dos tipos de tonos, unos amarillos para la iluminación cenital y otra neutra (que es la más parecida a la luz solar) para que puedas leer sin que se te canse la vista.

Tipo de lámpara de pie

En el mercado puedes encontrar varios tipos de lámparas de pie basándonos en la pantalla que tienen. Así, están:

  • Pantallas de estilo japonés. Con una pantalla en papel o un tejido muy ligero. Esto permite que la luz apenas se apague ya que sale por una pantalla muy final y solo elimina los destellos más potentes.

  • Pantallas de tipo tambor. Se caracterizan porque distribuyen la luz de un modo uniforme y crean una sensación cálida en el ambiente al estar encendidas.

  • Pantallas de tipo cónico. Son las que más se conocen (y las primeras que empezaron a fabricarse. Lo que hacen es aportar luz hacia abajo, y no hacia otros puntos, con lo que sería ideal para ponerla al lado de un sillón o una zona parecida. Eso sí, recuerda que, en esos casos, es necesario que tenga una altura de 150cm al menos y una intensidad mínima de 400 lúmenes.

Intensidad

Otro aspecto a tener en cuenta en las lámparas de pie es la intensidad de la luz ya que, si hay demasiada, puede producir deslumbramientos y, si es muy poca, no iluminará de manera adecuada.

Para ello, lo mejor es tener lámparas de pie que sean regulables o que permitan dos tipos de luz, una más intensa que otra. Si además es flexible, para mover el brazo hacia un punto u otro, se podrá orientar la luz donde se quiera realmente.

Bombillas

Antiguamente las lámparas de pie se hacía con un tipo concreto de bombillas y no se podían utilizar nada más que esas. Ahora ya hay más variedad y, dentro de las bombillas de lámpara de pie tenemos:

  • Bombillas halógenas. Tienen un encendido instantáneo pero hay un problema con ellas, emiten calor, por lo que al cabo de un tiempo al lado de ellas es posible que te sientas incómoda. Su vida útil es de unas 2.000 horas.

  • Bombillas de bajo consumo. La vida útil suele aumentar, entre 6.000 y 10.00 horas. Eso sí, para estar a su máxima potencia hay que darles unos segundos porque encienden poco a poco.

  • Bombillas Led. Con una vida útil de 50.000 horas y consumiendo un 80% menos que las bombillas incandescentes, son la mejor elección. No generan calor, no hay que darles segundos para que den luz de verdad y además reproducen bien los colores.

Qué mantenimiento necesita una lámpara de pie

Las lámparas de pie, como cualquier otra lámpara, necesita de un mantenimiento para que esté en buena calidad siempre. Para ello, nuestras recomendaciones son:

  • Trata de limpiar el polvo del pie de la lámpara siempre que puedas porque con ello evitarás que pueda introducirse en el interior (donde están los cables) suciedad o polvo que perjudique el uso de la misma.

  • A la hora de limpiar la pantalla de la lámpara debes tener en cuenta el material de que está hecha. Si es de tela, tendrás que usar espuma para limpieza en seco; si es papel, solo tendrás que pasar un paño humedecido por encima con cuidado de no presionar demasiado para que no se rompa; si es pergamino, usa mejor esponja y jabón neutro.

  • Si tienes animales, controla que no jueguen con el cable de la lámpara de pie. Si no quieres tenerlo en el suelo, siempre podrías crear un bonito diseño con ese cable ya que es algo que se lleva y está muy de moda actualmente.

  • Si ves que la lámpara empieza a tener problemas con la luz (parpadea o parece que se va a fundir) revisa las conexiones y la bombilla para evitar un problema mayor.

  • Si los cables están rotos o ves que moviéndolos se apaga o enciende, lo más seguro es que tengas que cambiar el cableado para que no haya problemas en la misma. Cambiar los cables de una lámpara de pie no es difícil y lo harás en un rato. Además, eso te permitirá cambiar el color del cable o hacerlo más largo o más corto según tus necesidades.

En Krealo somos conscientes de la importancia de las lámparas y, en general, de toda la iluminación de un hogar o una oficina. Es por eso que somos profesionales expertos en este tema y podemos ayudarte a lograr que tu hogar o tu trabajo sea lo más eficiente posible con luces que ahorren y el mobiliario de iluminación perfecto para cada estancia.

Solo tienes que ponerte en contacto con nosotros si te surgen algunas dudas y comentarnos. No lo dudes, estamos aquí por ti.

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